Hace falta la potencia de millones de ordenadores para simular las conexiones que hacen de un cerebro lo que es. Un grupo multidisciplinar e internacional lo intenta al amparo del proyecto Blue Brain. Tratan de replicar su funcionamiento y, en el proceso, entenderlo mejor. Javier de Felipe, director del grupo español que colabora en esta iniciativa, ha desgranado las dificultades a las que se enfrentan en una conferencia en el Centro de Innovación del BBVA, en Madrid.
«Es el órgano del alma», ha afirmado el investigador durante su charla. «Somos nuestro cerebro». Y sin embargo, ha declarado, la gente no le presta demasiada atención. No es el caso de la comunidad científica, que dedica cuantiosos recursos humanos y económicos a su estudio. En Blue Brain, ha explicado, trabajan «matemáticos, músicos, ingenieros, fisiólogos, biólogos moleculareseX03». Todos con intención de crear una «corteza cerebral de silicio».
Replicar un cerebro en un ordenador permitiría ‘probar’