Más de 10.000 murcianos mayores de 64 años padecen algún tipo de demencia. El número de afectados, especialmente en enfermedades como el alzhéimer, aumentará en los próximos años fruto del envejecimiento de la población. Muchos de ellos acudirán a los tribunales en busca de una declaración de incapacidad. De hecho, siete de cada diez incapacitaciones en España están ya provocadas por estas enfermedades. Por eso, un grupo de expertos de todo el país -entre ellos la neuróloga Carmen Antúnez, directora de la Unidad de Demencias de La Arrixaca- ha elaborado un informe, el documento Sitges 2009, en el que abordan esta situación. Los profesionales han analizado cuál es el grado de capacidad que suele presentar este tipo de pacientes «para tomar decisiones durante la evolución de su enfermedad».
Actualmente, en la mayoría de los casos se termina declarando la incapacidad total. Sin embargo, los expertos creen que esa incapacitación debería ser en muchas ocasiones «parcial, progresiva y a medida» de la situación real del enfermo. «Una persona con demencia, por ejemplo, puede no tener capacidad para conducir un coche o para hacer una transacción comercial, pero sí estar capacitada para el resto de actividades de la vida diaria».
Testamento vital
La doctora Antúnez recuerda que en España y en la Región hay instrumentos, como el testamento vital, que pueden ser muy útiles para estos enfermos. Sin embargo, «pocas personas expresan sus voluntades anticipadas en este documento» y muchas desconocen la existencia de una figura, la de la autotutela, que permite al enfermo decidir quién tomará las decisiones por él una vez que el proceso de demencia le incapacite. El informe Sitges será presentado hoy a las cinco de la tarde en el centro cultural Las Claras. El estudio ha sido impulsado por el Grupo de Trastornos Cognitivos y de la Conducta de la Sociedad Española de Neurología (SEN).
Fuente: laverdad.es