Las obras de transformación de la Casa del Mar para acoger un centro de día para enfermos de alzheimer ya terminaron, pero este servicio aún tardará varios meses en entrar en funcionamiento. Por ello, el inmueble permanece cerrado y los cinco trabajadores que prestaban tareas de seguridad en las instalaciones han perdido sus puestos, al finalizar el pasado día 31 de diciembre el contrato de su empresa con la Xunta, tal y como denunció la CIG esta semana.
La Consellería de Traballo admitió que los trabajos de adecuación han llegado a su fin, pero explicó que, para su reapertura, aún resta acometer dos fases. En primer lugar, tiene que convocar el concurso público para el equipamiento del centro y estos trámites están en su fase inicial. Posteriormente, el Ejecutivo gallego tendrá que abrir un nuevo concurso para la concesión de la gestión del centro, por lo que asume que no será hasta dentro de unos meses cuando pueda entrar en funcionamiento.
No obstante, la puesta en marcha de este servicio vendrá a mejorar la calidad de vida de los enfermos y sus familias. Está previsto que cuente con unas 40 plazas, una cifra similar al número de personas que atiende diariamente en su sede la Asociación de Familiares de Enfermos de Alzheimer (Afal).
La decisión de remodelar las instalaciones sobre el recinto portuario para prestar atención a los pacientes la tomó el anterior gobierno autonómico, formado por PSOE y BNG, cuando la Xunta asumió parte de las competencias de las Casas del Mar.
El inmueble estará integrado en la Rede Galega de Centros de Día de Alzheimer, que se puso en marcha con el objetivo de permitir a las familias una asistencia especializada de los enfermos, durante parte o la totalidad de la jornada, y evitando así que los pacientes sean ingresados en residencias.
En el área sanitaria de la comarca están diagnosticadas unas 4.000 personas que padecen esta enfermedad, por lo que el centro vendrá a aliviar pero no a cubrir totalmente las necesidades de los afectados.
Fuente: lavozdegalicia.es
