Errores nutricionales, falta de ejercicio físico, intoxicación por la contaminación ambiental y por los alimentos que ingerimos son, junto al declive hormonal y el estrés oxidativo y psíquico, los principales factores del envejecimiento patológico y acelerado, según explica José Rodríguez, especialista en Medicina Antienvejecimiento de Clinalgia, un centro dedicado a frenar el envejecimiento patológico y a aliviar dolores crónicos.
Rodríguez asegura que si bien la expectativa de vida se ha incrementado de forma muy importante para el conjunto de la población, las patologías crónico degenerativas son cada vez más frecuentes, lo que merma en gran medida la calidad de vida de las personas mayores.
El primer paso para evitar el deterioro prematuro consiste en cambiar algunos de nuestros hábitos de vida. En este sentido, recuerda que las dietas hipercalóricas, con exceso de azúcares refinados, proteínas de origen animal y grasas saturadas son, en cierta medida, los causantes del envejecimiento acelerado. El otro gran enemigo es la falta de ejercicio físico. Estos factores decisivos en el envejecimiento prematuro son, por otra parte, fácilmente modificables por lo que hay que insistir en el consumo de frutas, verduras frescas, legumbres, productos integrales y pescado, en sustitución de los alimentos anteriormente citados, así como incentivar la práctica de ejercicio moderado y adaptado a cada edad para conservar la funcionalidad del organismo.
El doctor José Rodríguez alude también a otros factores como son la acumulación crónica y progresiva de toxinas en el organismo, por lo que las técnicas de desintoxicación o depurativas son básicas en la prevención de enfermedades.
Hormonas
Desde un punto de vista biológico, una vez cumplidos los ciclos vitales, la naturaleza nos elimina quitándonos las hormonas, es por ello que a partir de los cuarenta y coincidiendo con la disminución de los niveles de numerosas hormonas, comienza el declive, la compensación hormonal, es clave en la prevención de múltiples patologías típicas de la vejez como el Alzheimer, Parkinson, etc.
Igualmente, el exceso de oxidación celular se consideran responsable del envejecimiento patológico y de otras enfermedades como el cáncer, de ahí la importancia de una correcta alimentación y del uso de suplementos antioxidantes equilibrados e individualizados según necesidades.
El doctor José Rodríguez recuerda que, según diversos estudios, los genes sólo influyen un 25 por ciento en el envejecimiento y que sólo un 5 por ciento se debe a factores no modificables, mientras que el restante 70 por ciento es responsabilidad individual. En este sentido, Rodríguez recuerda que, en la actualidad, es la persona quien tiene en su mano el poder para decidir cómo quiere envejecer.
La medicina antienvejecimiento es una disciplina médica en la que, desde criterios estrictamente científicos, interviene sobre los factores implicados en el envejecimiento patológico, tanto en el aspecto físico como estético, lo permite ganarle años a la vida y añadirle vida a los años.
Fuente: laverdad.es
