El centro asistencial 'Grove Care', situado en la pequeña localidad británica de Winterbourne, ha tenido una original idea para ayudar a sus residentes con demencia a estimular su memoria y evocar la nostalgia de los viejos tiempos. De esta forma, la residencia ha construido una réplica exacta de una típica avenida británica de la década de los 50, con tiendas, bares y escaparates que mantienen con fidelidad la estética de los años de posguerra.
"Nuestros residentes pueden pasear y visitar la cafetería y la oficina postal, donde se les anima a charlar con sus cuidadores de sus experiencias en aquellos tiempos. Los carteles y el diseño de los productos reflejan la época con exactitud, y les ayuda a rememorar su pasado", aseguró Christopher Taylor, responsable de la organización, al diario Daily Mail.
Sin embargo, la propuesta podría tener un éxito arrollador entre las generaciones más veteranas, y entre los fans del diseño vintage, si la 'calle de la memoria' abriera sus puertas al público general. Los periódicos de la tienda de ultramarinos llevan a sus portadas la coronación de la reina Isabel II, que tuvo lugar el 1952, los carteles anuncian como novedad las primeras cuchillas de afeitar de una sola hoja, y las cajas de dulces tradicionales se confunden en el mostrador con las cartillas de racionamiento.
Pero esta inusual iniciativa se limita exclusivamente a mejorar las condiciones de los pacientes con Alzheimer, y su planteamiento sigue los últimos estudios médicos que aseguran que hablar del pasado beneficia a la memoria. Así, una investigación de la universidad de Exeter concluyó en 2009 que los veteranos de guerra que compartían su experiencia con otros en su misma situación podrían recuperar hasta un 12% de su capacidad para recordar.
Fuente: lasprovincias.es