NUEVA YORK - Una variación en un gen llamado apolipoproteína E (APOE) afecta cómo la hormona relacionada con el estrés denominada cortisol influye en el pensamiento o la capacidad "cognitiva" en los adultos mayores, reveló un informe publicado en American Journal of Psychiatry.
En particular, la versión E4 del gen, que es un conocido factor de riesgo de la enfermedad de Alzheimer, incrementa el daño cognitivo observado en pacientes con altos niveles de cortisol.
En respuesta al estrés, el cortisol también eleva la presión arterial y los niveles de azúcar en sangre y suprime el sistema inmune.
Los niveles elevados de cortisol serían indicadores de una serie de enfermedades.
En un estudio con 967 adultos mayores, el equipo del doctor Brian S. Schwartz, de la Johns Hopkins University en Baltimore, halló que los niveles más altos de cortisol en saliva se relacionaban con un peor desempeño cognitivo.
El estudio actual investigó al mismo grupo de pacientes, pero incluyó datos sobre el tipo de APOE.
Las pruebas cognitivas se focalizaron en una serie de funciones, entre ellas el lenguaje y la memoria.
Los niveles de cortisol se midieron en muestras de saliva obtenidas antes, durante y después de las pruebas cognitivas. Además se emplearon muestras de sangre para evaluar el APOE.
En los participantes con niveles normales de cortisol, la presencia de una o dos copias de la versión E4 del APOE no empeoraron su capacidad cognitiva.
En cambio, en las personas con altos niveles de cortisol, una copia de la versión E4 del gen APOE perjudicó muchas habilidades cognitivas. Con dos copias de E4, todas las capacidades empeoraron.
Estos resultados son factibles, debido a la amplia distribución de receptores de cortisol en el cerebro y a la influencia del APOE en múltiples aspectos de la actividad cerebral, escribieron Schwartz y sus colegas.
Los hallazgos sugieren que el APOE influye en el efecto del cortisol sobre la función cognitiva y que la versión E4 hace al cerebro envejecido más vulnerable a los efectos adversos del estrés, concluyeron los autores.
Fuente: buenasalud.com