La consejera de Familia e Igualdad de Oportunidades de Castilla y León, Milagros Marcos, ha pedido al nuevo Ejecutivo que preside Mariano Rajoy que busque el consenso en el conjunto del país y ejerza un liderazgo en las grandes líneas de coordinación en las diferentes políticas para evitar lo ocurrido con la aplicación de la Ley de Dependencia, que ha supuesto "17 modelos de atención".
Marcos ha solicitado al nuevo Gobierno que, en materia de políticas sociales, trabaje por el consenso que no se ha logrado en los últimos años del Ejecutivo socialista, "con una política estable y de coordinación y no de atropellos y de cambios cada dos por tres".
La consejera cree que hay "cambios demasiado frecuentes" y al final lo que se necesita es "estabilidad", garantía de que las políticas "no cambien de un día para otro" porque se está hablando "de un tema muy serio".
En este sentido, Marcos considera que hay que hacer un análisis de las diferentes comunidades y de la situación del país para intentar aprovechar las medidas que funcionan en unas comunidades se apliquen en otras.
Más coordinación
En materia de aplicación de la Ley de Dependencia, ha concretado que hay que aplicar una simplificación administrativa, administración electrónica y coordinación entre comunidades en los temas sustanciales, que es lo que se ha reclamado en los últimos años.
"Parece una ley estupenda acordada por todos en el Parlamento y sin tener los elementos básicos para poderla aplicar exigen que se aplique el día después", ha recordado la consejera, quien ha atribuido el hecho de que haya "17 modelos de atención" a que no haya habido un desarrollo "tranquilo, consensuado y firme" desde el principio.
"No ha habido un liderazgo en la ley de dependencia y la falta de liderazgo, las prisas y la improvisación han hecho que cada comunidad haya resuelto sus problemas como mejor ha considerado que haya que hacerlo", ha aseverado.
De esta forma, ha añadido que si se hubieran establecido los criterios comunes, de capacidad económica, valoración, etcétera, "en el último momento" no se hubiera tenido que aprobar, en diciembre de 2007, una orden que recogía expresamente estas cuestiones, cuando la estatal apareció dos años después. "Entonces cada uno tenía sus propias normas, había hecho una aplicación informática con todos sus parámetros, era imposible", ha matizado.
Por ello, ha insistido en que intentar avanzar en estas medidas de consenso es "fundamental", un "liderazgo nacional", que cree que es lo que tiene que tener el Gobierno central, al margen de que cada comunidad tenga competencia en su gestión.
En cuanto al futuro de la Ley de Dependencia, la consejera castellana y leonesa ha aclarado que no se conoce la situación en todo el ámbito nacional, pero en el caso de Castilla y León la atención "está garantizada", pero no sólo en esta materia, sino en el marco de la Ley de Servicios Sociales, donde se incluye también a las personas dependientes, pero también al resto porque el próximo año entrará en vigor el Decreto que establece una solicitud única de acceso.
Fuente: elmundo.es
