El servicio es novedoso y permite, tanto a las familias como a los cuidadores de los enfermos, tener espacios de tiempo libre para poder desarrollar sus actividades sociales
La Asociación de Familiares de Enfermos de Alzheimer y otras demencias seniles de Albacete (AFA), desde hace unos años, viene desarrollando lo que se conoce como el programa de descarga familiar a domicilio, un servicio que en la actualidad AFA tiene subcontratado, pero que en los últimos año se ha convertido en uno de los más demandados por las familias de los afectados de alzheimer.
De hecho, según informó la presidenta de AFA, Aurora Ortiz, en lo que llevamos de año son 23 los usuarios de este programa, que se viene prestando desde las asociación desde el año 2003 y que desde entonces ha ido en aumento, tanto en usuarios como en horas utilizadas por los mismos.
Ortiz explicó que se trata de un programa que ofrece un apoyo domiciliario para ayudar a los cuidadores y las familias en sus tareas con el enfermo además de posibilitar espacios de tiempo libre al cuidador para que éste pueda desarrollar actividades sociales, destacando el número ilimitado de horas en la prestación del mismo.
No obstante, dada la demanda se ha establecido un límite aproximado de 40 horas mensuales por usuario, aunque no se supera la cantidad de 500 horas mensuales entre todos los usuarios.
Entre las actividades que se realizan a través de este programa domiciliario, que fundamentalmente son de apoyo en el cuidado del enfermo, figura la de acompañar al enfermo a consultas médicas, hacer la compra o pasear; colaborar en la higiene personal del enfermo, ayudar a acostar y levantar al enfermo, así como el apoyo en la ingesta de comidas.
El precio de la hora normal que las familias tienen que abonar por la prestación de este programa es de 6,42 euros y de 7,90 euros en el caso de la hora festiva.
La presidenta de AFA recordó que el objetivo general de este servicio pasa por posibilitar un espacio de descarga familiar en el domicilio, ofreciendo un apoyo domiciliario para ayudar a los cuidadores en sus tareas con el enfermo, al tiempo que ofreciéndole espacios de tiempo libre para que puedan realizar actividades, como por ejemplo asistir a una boda.
Fuente: latribunadealbacete.es
