La mayoría de los usuarios proceden de Zamora capital y sólo un 5% son de zonas rurales, como Cubillos, Sanzoles, Morales del Vino y Venialbo
El 56% de los enfermos de Alzheimer tratados en el Centro Terapéutico de Día Ciudad Jardín de Zamora mantenían al final del pasado año el mismo nivel cognitivo que cuando iniciaron su terapia, según el director gerente de la entidad, Manuel Figueruelo Martínez, cifra que considera muy satisfactoria.
Y es que, el objetivo del centro, que trata de «cubrir todas las necesidades del enfermo de demencia», es, según sus palabras, detener en la medida de lo posible el avance de la enfermedad, mantener la autonomía de los enfermos y hacer que se sientan útiles.
Según la memoria de actividades de 2007 de la Asociación de Familiares y Amigos de Enfermos de Alzheimer y otras demencias de Zamora, fueron atendidos 58 usuarios, de los cuales el 95% procedían de Zamora capital y sólo el 5% de zonas rurales como Cubillos, Monfarracinos, Sanzoles, Morales del Vino y Venialbo, municipios del entorno de la capital.
El servicio de atención al paciente recibió, a lo largo del ejercicio 57 demandas de información, la mayoría relacionadas con el centro de día. El 20% de estas demandas fue por iniciativa de las hijas de los enfermos, seguidas de los esposos y esposas.
Durante el pasado año se dieron 14 altas y 19 bajas. Éstas últimas «en estados muy avanzados de la enfermedad» y por causas como el ingreso de los pacientes en residencias, fallecimientos, empeoramientos de salud o cambio de residencia habitual.
Manuel Figueruelo recordó que en el centro no sólo se atiende a personas afectadas de Alzheimer, «aunque es la demanda en el 63% de los casos», sino con cualquier tipo de demencia.
También se impartieron 15 talleres de lenguaje, estimulación sensorial, musicoterapia, lectura y cálculo. Una de las novedades e innovaciones ha sido el programa de acuaterapia en la piscina climatizada de Zamora que se utiliza para trabajar aspectos funcionales y que, según Figueruelo, ha producido ciertas mejoras en algunos pacientes.
Según los datos, el servicio de atención especializada a domicilio hizo esta prestación a un total de 15 enfermos y a sus respectivas familias ya que se trata de que los familiares, que son los principales cuidadores, puedan compaginar sus trabajos con la atención al enfermo: «Tratamos de ayudarles a entender la enfermedad y a que mantengan su calidad de vida», explica.
El perfil de las familias de estos enfermos es muy concreto, según calificó Figueruelo, quien aseguró que se trata de núcleos familiares de avanzada edad y bastante reducidos porque emigraron a otras zonas en el pasado.
El centro terapéutico de día ha puesto en marcha el programa de voluntariado en el que han participado 23 personas, «en su mayoría amigos o familiares de enfermos» y que desarrollaron su labor como apoyo en las salas de atención a los enfermos y participando en los diferentes talleres: «Es muy positivo porque contagian a los ciudadores con sus ganas, optimismo, su espíritu altruista y sus ganas de colaborar», señala Figueruelo.
«Debido al incremento de la demanda en el centro de día y a ciertas carencias de espacio», la asociación ha puesto en marcha las obras de ampliación del edificio con un presupuesto de 716.271,48 euros. Tras su ejecución, el centro contará con 60 plazas. Las nuevas instalaciones estarán operativas, según Felipe Ramos Llano, presidente de la asociación, en enero de 2009.
El año pasado también se estrenó la página web que tiene una media de 37 visitas diarias y, desde la que se han atendido 62 consultas, «muchas de ellas procedentes de otros países de habla hispana».
La Asociación de Familiares y Amigos de Enfermos de Alzheimer pide más ayudas institucionales y más sensibilidad con los enfermos y sus familias.
Así lo solicitó ayer el presidente, Luis Felipe Ramos, quien declaró que las ayudas que reciben «dan un poquito de pena» ya que los gastos durante el pasado año superaron los 400.000 euros. Asimismo recordó la colaboración que reciben de organimos como la Obra Social de Caja España, Bancaja, Gerencia de Servicios Sociales, la Diputación y el Ayuntamiento.
La Afaza también posee un centro propio de formación continua en el que se imparten cursos especializados de atención, auxiliar de ayuda a domicilio y monitor sociocultural, que permiten que los alumnos realicen prácticas en el propio centro de día.
Estos cursos también suponen una fuente de financiación porque «nos tenemos que buscar las habichuelas», explica Ramos.
Fuente: Nortecastilla.es