Hola hermana: Tus más de ocho años a la cabecera de tu marido, merece esta carta que hoy te envío desde estas páginas del Diario LANZA, en las que me acogen más de medio siglo. Ante todo quiero que los que nos lean hoy sepan la historia de un hombre que lleva “muerto” cuatro años, desde que se agudizó su enfermedad. Inmóvil con los ojos abiertos a veces, o con los párpados cerrados otras, ajeno por completo a la vida que aún le late en su cuerpo. Todo el que le conocemos, sabemos que fue un trabajador ejemplar, padre de cuatro hijos, por los que luchó (con tu ayuda) para hacerlos hombres de bien. Bien relacionado con la sociedad y por el amor que sentía a nuestra Patrona Virgen del Prado, fue envestido como “pandorgo” en 1998. Este “pandorgo” se sigue llamando Rafael Arcos, pues su maltrecho corazón le sigue latiendo, a su lado tú, mi hermana, que sigues su dramática enfermedad días, noches y horas, muchas de ellas con el martirio del “mal dormir”, bomba de relojería que va minando la salud del que la sufre y que sólo os mantiene la fe, por que como tú hay miles. Vigilante siempre en la cabecera del lecho de tu marido, sin la inagotable pequeña llama de la esperanza ante el desesperanzador “no” de la medicina. Sé que te sentirstes feliz hace unos días porque Bienestar Social te había concedido una paga de 400 euros y con ello te reconocían de alguna forma esas 3.000 horas dedicadas a Rafa, en la que sólo con tu impresionante entereza sabes dominar todas las malas situaciones. También sé, que de alguna forma el Centro local de Alzheimer te ha abandonado, al retirarte la asistencia de cuidadores, que dicho Centro te enviaba varias horas al día aunque tuvieses que pagar la mitad, por pertenecer como socia activa de la Asociación. Asociación a la que durante años ayudastes en postulaciones, visitas y cuanto se relacionaba con dicho Centro. Hoy, Mar Garrido, presidenta del Centro Alzheimer posiblemente por el tema crisis, te ha comunicado, que ya no hay ayudas ni asistencias. ¿Es justo? ¿Con sólo 400 euros que ahora te otorga Bienestar Social, tendrás suficiente? Quiero que esta carta que hoy te escribo sea extensiva a todas estas personas que hacen frente a esta dolorosa enfermedad y a cuantos viven con ella. Especialmente a ti hermana y a otro familiar como es Lorenzo, que está sufriendo los rigores de otra enfermedad similar y que le tiene al lado de su esposa, en perpetua vigilia, con la esperanza de que la medicina ayude a Pradito.
Un fuerte abrazo.
Fuente: lanzadigital.com
